Estamos en Marcellina, un pueblo de la provincia de Roma, en la noche del 17 al 18 del pasado mes de septiembre. Tres personas bajan rápidamente de un coche con la cara tapada por un pasamontañas. En cuestión de segundos consiguen forzar la cortina metálica de una joyería, entrar y robar joyas por un valor de cincuenta mil euros.
La peculiaridad de este robo es que las cámaras de vigilancia grabaron toda la acción y el vídeo se colgó en la red, pero acciones de este tipo se repiten cada noche en toda Italia. Las cortinas metálicas enrollables son el sistema más utilizado para cerrar tiendas, almacenes y garajes. Todos estos lugares son especialmente atractivos para los ladrones, porque contienen objetos de valor y suelen estar sin vigilancia durante largos periodos de tiempo, sobre todo por la noche.
¿Se puede hacer algo para impedirlo?Las técnicas para forzar una cortina metálica enrollable son esencialmente 2: atacarla en bloque (hundiéndola, extrayéndola o cortándola), o bien neutralizar la cerradura para poder subir cómodamente la cortina metálica, e incluso cerrarla a sus espaldas para poder “trabajar” sin ser molestados. Elegir un buena cortina metálica enrollable, equiparla con una cerradura resistente e instalar todo ello correctamente son medidas fundamentales para la seguridad de una tienda, almacén o un garaje, porque contrarrestan ambos tipos de ataques.
Las cerraduras blindadas
Lamentablemente las cerraduras instaladas de origen en las cortinas metálicas enrollables suelen ser de mala calidad, quizás están realizadas con simple chapa moldeada, y fáciles de atacar. Los cilindros no son resistentes al taladro, y el cuerpo y los cerrojos se rompen fácilmente bajo la acción de herramientas como la alzaprima.
Una alternativa más segura es usar cerraduras blindadas que montan cerrojos más resistentes y tienen la estructura y el cilindro protegidos contra los ataques de fuerza bruta, como la Viro 8217, provista de manilla y con desbloqueo para la apertura desde el interior.
O como la nueva Viro 8271 (disponible a inicios de 2014), diseñada para ser fácilmente intercambiable con la mayoría de cerraduras para cortinas metálicas enrollables ya instaladas, y con medio cilindro reemplazable a placer.
En ambos casos, la cerradura está protegida contra el desgarro y el taladro, la caja está reforzada y protegida por una placa de acero zincado, y los cerrojos son de mayor espesor (3 mm en la 8217 y 7 mm en la 8271).
Obviamente, la resistencia de la cerradura debe estar equilibrada con la de la cortina metálica enrollable, por lo que las cerraduras blindadas son el complemento ideal parra las cortinas metálicas enrollables de buena calidad.
Llaves de perfil simétrico y llaves de perfil especular
Los cilindros de las cerraduras para cortinas metálicas enrollables deben ser lo suficientemente cortos para no interferir con el enrollado de la cortina metálica, por esto son simples cilindros, y no dobles. Por lo general esto no es un problema, porque suelen abrirse y cerrarse solo desde el exterior. Si, en cambio, es preciso abrirlas y cerrarlas también desde el interior, las soluciones pueden ser dos:
- usar una llave de perfil simétrico, que utiliza solo la mitad de las combinaciones que teóricamente pueden obtenerse del cilindro, ya que la altura del primer diente de la llave debe ser igual a la del último diente, la del segundo diente igual a la del penúltimo, y así sucesivamente,
- o bien utilizar un par de llaves, una para el interior y otra para el exterior, con perfil especular.
La segunda solución es claramente la más segura y la que, precisamente por el mayor número de combinaciones que ofrece, se presta mejor a aplicar sistemas de llave maestra.
¿Cerradura, candado o grupo de fijación?
Otra alternativa más segura respecto a una cerradura común instalada de origen es utilizar un buen candado, que fije la cortina metálica enrollable al suelo. Precisamente el anclaje al suelo es el punto fuerte de esta solución. En este caso es fundamental usar anillos de fijación que tengan la misma resistencia que los materiales usados en la fabricación de los arcos o de los vástagos de los candados (aceros cementados y templados), para evitar que los ladrones puedan cortar los puntos de fijación; además, estos últimos deben estar especialmente diseñados para adaptarse perfectamente a los candados específicos, al objeto de no dejar espacio para introducir herramientas de descerrajamiento entre el candado y los anillos. Como ya vimos en otro artículo un candado fijado de manera inadecuada deja mucho espacio para que pueda introducirse una alzaprima. Así pues, es mejor utilizar un grupo de fijación para cortinas metálicas enrollables que, con su gruesa coraza, protege eficazmente el punto de fijación al suelo.
¿Dobles cerraduras laterales o cerradura simple central?
Las cerraduras laterales tienen la ventaja de tener cerrojos más cortos y, por tanto, menos sujetos al efecto palanca. La elección entre cerraduras laterales y cerradura simple depende sobre todo de la anchura de la cortina metálica enrollable. Si es inferior a 2,5 metros puede ser suficiente una sola cerradura central, pero para anchuras superiores se aconseja montar 2 cerraduras laterales. Si se superan los 4 metros de anchura se recomienda montar 2 grupos de fijación, que garantizan una mayor sujeción. Con las cerraduras y los grupos de fijación Viro se pueden realizar sistemas KA para que todas las cerraduras se abran con la misma llave.
La Tranca Universal
La Tranca Universal Viro tiene la ventaja de mejorar tanto la seguridad de la cerradura como la resistencia mecánica de la cortina metálica contra el desgarro y el hundimiento. Desde el punto de vista de la cerradura, la Tranca ofrece la posibilidad de montar cualquier medio cilindro de perfil europeo, lo que permite elegir productos que ofrezcan la máxima seguridad.
El cilindro puede ser protegido aún más montando un escudo antitaladro y a prueba de desgarro.
El cuerpo de la Tranca puede montarse sobre el elemento en la base de la cortina metálica enrollable, reforzándolo contra el hundimiento.
La protección contra el desgarro viene dada por los dos cerrojos con extremos de anclaje de acero macizo de 14 mm de diámetro.
Como siempre, la seguridad general depende de la seguridad del eslabón más débil de la cadena, que en muchas cortinas metálicas enrollables es, precisamente, la cerradura . Utilizar una solución más segura que una cerradura instalada de origen incide poco en el coste total, pero aporta mucho a la resistencia global de la cortina metálica enrollable.
Mira cómo se instalan las cerraduras laterales para cortinas metálicas enrollables Viro
Mira cómo se instala una cerradura central para cortinas metálicas enrollables Viro
Consulta el catálogo de las cerraduras para cortinas metálicas enrollables Viro
Consulta el catálogo de los grupos de fijación Viro
¿Tienes un garaje que proteger? ¡Descubre cómo en garage.clubseguridadviro.es!
BUENOS DIAS
NECESITO 3 CHAPAS PARA PUERTA ENROLLABLE
EN QUE DIRECCION EN BOGOTA LAS PUEDO CONSEGUIR