En el último artículo enumeramos algunas de las características que un cilindro de perfil europeo debe tener para garantizar un buen nivel de seguridad y, por lo tanto, una resistencia eficaz contra los ataques externos.
Lamentablemente, como ya comentamos, incluso el producto más resistente del mundo se convierte en vulnerable si se puede obtener fácilmente una copia ilegal de las llaves para abrirlo sin ninguna dificultad. Veamos entonces qué se entiende por perfiles patentados de duplicado controlado.
Hoy en día suelen ser muy frecuentes los traslados o los viajes por motivos de trabajo, estudio, etc. y, por lo tanto, crece la tendencia a alquilar apartamentos o solo habitaciones por cortos periodos de tiempo.
Un ejemplo de esta tendencia es el éxito obtenido por los portales como Airbnb, que permiten encontrar y reservar durante periodos más o menos largos apartamentos o habitaciones de privados en la localidad deseada, de manera cómoda e inmediata.
La idea es innovadora e interesante, pero algunas dudas acerca de la seguridad surgen espontáneamente. Dado el gran número de personas que aloja, aunque solo sea durante un corto periodo necesario para encontrar otro lugar, ¿cómo puede el propietario tener la certeza de que no se hagan copias no autorizadas de sus llaves para luego volverlas a utilizar? Esta duda también puede surgirle al potencial inquilino, el cual, al recibir unas llaves estándar que pueden duplicarse en cualquier lugar, podría no sentirse suficientemente protegido desde el punto de vista de la seguridad. Por lo general confiamos en la buena fe de las personas, pero a veces podría no ser suficiente.
Una solución a este tipo de problema puede ser adoptar un sistema de llaves de duplicado controlado. ¿Qué significa? La reproducción de la llave original solo puede realizarse en los centros autorizados presentando, junto con la llave original, una tarjeta de propiedad codificada.
Ejemplo de tarjeta de propiedad codificada.
Por consiguiente, el legítimo propietario, que posee la tarjeta de propiedad, es el único que puede solicitar una copia de las llaves y controlar la cantidad de copias existentes, tener un registro de las copias entregadas a los inquilinos y asegurarse de que siempre se devuelvan, como medida necesaria para asegurar seriedad y fiabilidad.
Viro también produce cilindros con llaves de perfil patentado de duplicado controlado.
Para ser precisos, existen dos tipos posibles de duplicado controlado: los anteriormente citados, que pueden hacerse solo en los centros autorizados por el fabricante (en la gama Viro son los denominados perfiles .PV) y los que solo pueden hacerse en la misma empresa (en la gama Viro se llaman perfiles .PB).
En este último caso, el usuario tiene que ir a la tienda donde adquirió el producto y el revendedor hará de intermediario entre el cliente y el fabricante, enviando a la empresa la solicitud de duplicado. De esta manera, la empresa tiene la certeza de que quien solicita la copia está autorizado a hacerlo, dado que ha mostrado la llave original y la tarjeta de propiedad al revendedor al que había comprado el producto. Obviamente, este procedimiento requiere algo más de tiempo para realizar el duplicado, ya que en el primer caso son suficientes unos pocos minutos en el centro autorizado, mientras que en el segundo se necesitan algunos días para que el revendedor reciba de la empresa, en sobre sellado, las copias solicitadas, se ponga en contacto con el usuario y se las entregue. Sin embargo, este procedimiento hace que la gestión de las llaves sea sumamente segura, porque es muy poco probable que un maleante consiga robar a la vez la llave original y la tarjeta de propiedad y, además, correría el riesgo de tener que presentarse en la tienda donde se compró el producto y esperar el tiempo necesario para que la empresa haga el duplicado.
Conclusiones
Mantener un registro del número de copias de las llaves (no sólo las de casa, sino también las de muchas otras situaciones) no es solo una ventaja en términos de protección si el propietario alquila o presta una propiedad por breves periodos de tiempo a otras personas, sino que puede ser esencial para evitar que la llave caiga en manos equivocadas, aunque sea por error o descuido, en caso de que colaboradores, empleados del hogar o conocidos tengan acceso a ambientes con bienes de valor o informaciones reservadas.