Pinceladas sobre la seguridad: cómo elegir un antirrobo de disco

Estamos en marzo y, finalmente, percibimos la tibieza primaveral: es el momento de “desempolvar” el scooter para moverse por la ciudad o hacer alguna excursión dominical en moto.
Para disfrutar de días tranquilos fuera de la ciudad con nuestra dos ruedas y estar seguros de encontrarla exactamente donde la hemos dejado, es esencial elegir la mejor protección posible, con el fin de evitar sorpresas desagradables.

En el mercado hay muchos sistemas de seguridad para proteger los vehículos de dos ruedas: protecciones mecánicas y electrónicas. Hoy vamos a hablar de una categoría muy utilizada: los antirrobos de disco, muy apreciados porque son ligeros y prácticos.
Sin embargo, no todos los antirrobos de disco son iguales, por lo que es conveniente elegir un producto que tenga las características necesarias para asegurar una protección real.

Los materiales

La calidad de los materiales utilizados para fabricar un antirrobo de disco es uno de los principales factores que determinan su solidezy, por consiguiente, su resistencia a los intentos de romperlo o cortarlo.
En un antirrobo de disco es esencial que al menos el vástago, que es el componente sometido a mayor esfuerzo en los intentos de reventado, sea de acero y que éste sea templado para resistir los golpes. Los antirrobos de disco más sólidos son aquellos que tienen el cuerpo completamente de acero.

El Viro New Hardened, por ejemplo, tiene un cuerpo monolítico de acero cementado, templado y pintado. El vástago de cierre, que puede tener un diámetro de hasta 14 mm, está realizado con el mismo material. Es un sistema antirrobo especialmente resistente a los ataques con martillos, palancas y herramientas de corte, así como al key-bumping, gracias a la cerradura con un tambor de 6 discos.

Un vástago de cierre de acero cobrizado, niquelado y cromado (como el de todos los antirrobos de disco Viro) es más resistentea la oxidación y la corrosión, por lo que también asegura una mayor duración aunque se use al aire libre y en condiciones climáticas agresivas, como son las de un antirrobo de disco que se utilice en exteriores.

La forma del cuerpo

Romper o abrir hábilmente un antirrobo de disco, así como un candado común, es más fácil si puedes aferrarlo firmemente.
Por esta razón los mejores antirrobos de disco tienen formas que hacen difícil aferrarlos con una herramienta de descerrajamiento. Este es el caso, por ejemplo, del Viro Armadillo, caracterizado por su cuerpo con forma “de escamas”.

 

La protección electrónica adicional

Como siempre recomendamos, es conveniente combinar una protecciónelectrónica con una protección mecánica. Un antirrobo de disco con alarma responde a nuestra idea de doble protección en un solo cuerpo. Por lo general está provisto de uno o más sensores capaces de detectar los intentos de robo y de activar una sirena que perturba al atacante.

El antirrobo de disco con alarma Viro Echo, por ejemplo, está equipado con un sensor capaz de detectar el movimiento del vehículo y, por lo tanto, un posible intento de robo. El más avanzado Viro Sonar está equipado con 2 sensores, uno de movimiento y otro de vibración. Por lo tanto, es capaz de detectar no solo los intentos de mover la motocicleta, sino también los de manipular sus dispositivos de defensa como, precisamente, el antirrobo de disco.

Así pues, un antirrobo de disco con alarma es una buena combinación para aumentar la seguridad de nuestra dos ruedas.

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