Cuando se habla de cerraduras hay que tener en cuenta que las hay de muchos tipos. Baste pensar que las cerraduras, en función del tipo de instalación -en la puerta o en el interior de la misma- pueden ser de sobreponer o de embutir; según el número de elementos de cierre pueden tener uno o más pestillos, uno o más cerrojos o estos dos elementos a la vez; dependiendo de la forma y del tipo de movimiento de cierre, el cerrojo a su vez puede ser rotatorio o de gancho basculante; en función del tipo de accionamiento las cerraduras pueden ser manuales, eléctricas o electrónicas, etc.
Cada tipo es adecuado para un uso específico y por esto debe elegirse con cuidado.
¿Cuándo es aconsejable instalar una “cerradura de rodillo”?